La instalación de tachones viales y delineadores tubulares en vías principales y en el interior de los barrios no para de generar controversia en Cali.
Mientras la queja recurrente entre los vecinos y conductores es que estos elementos reducen el espacio que podrían ocupar los vehículos que transitan por los corredores y generan congestiones, la Secretaría de Movilidad advierte que esta es una inversión orientada a ‘pacificar’ el tránsito y reducir los accidentes.
Uno de los casos que levantó una polvareda de críticas se registró en el barrio El Sena, a pocos metros de la Secretaría de Movilidad. Allí, sobre la Calle 47 entre carreras 1D y 5A, los vecinos del sector advierten que la instalación de estos elementos les quitó carriles para los vehículos, lo que ya empezó a generar líos de movilidad y ocupación de espacios públicos.
Mauricio Bedoya, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio dijo que “el 80 % de los residentes está en desacuerdo con lo que hicieron, porque de cuatro carriles que tenía la vía, pasamos a dos. Por aquí pasan camiones de 25 y 40 toneladas y como les redujeron el espacio, algunos se están subiendo a los andenes y circulan por vías internas, eso termina dañando el pavimento y no vemos que haya control”.
El líder barrial señaló que ya radicó ante la Alcaldía un derecho de petición, respaldado con 405 firmas, para solicitar el retiro de estos elementos. “No estamos en desacuerdo con los reductores de velocidad y mejorar la vía, pero este trabajo está mal hecho y se hizo sin consultar. Entre las carreras 2 y 3, por ejemplo, la calle está en mal estado y en los huecos que había pusieron los bordillos, fue un trabajo mediocre”, afirmó Bedoya, quien señaló que varios de los delineadores ya fueron derribados por vehículos.
Donde tampoco ha sido bien recibida esta medida es en el barrio Santa Teresita, en el oeste de Cali. Allí estos elementos se ubicaron sobre la Carrera 1 entre calles 12 y 13.
Alfredo Castaño, residente de dicho barrio, indicó que los tachones de plástico y segregadores generan congestiones en este sector del Oeste, sobre todo en los fines de semana. “Antes teníamos dos carriles anchos para manejar, pero ahora solo quedamos con uno. Al Zoológico viene mucha gente y la movilidad suele complicarse, entonces uno no entiende cómo atinan a reducir el espacio que teníamos”.
En el Sur, en Pampalinda, varios vecinos también se quejan por la ubicación de estos elementos sobre la Calle 2, en inmediaciones de la Institución Educativa Politécnico Municipal.
“Nos quitaron un carril y la congestión se disparó en esta parte del barrio, especialmente cuando salen los estudiantes en la tarde, porque hay gente que los recoge y ahora parquea el carro en la mitad de la vía. Por hacer un bien, terminaron perjudicándonos a todos los que vivimos por aquí”, dijo Alberto Cuadros, residente de la zona.
Pero la instalación de estos elementos no es nueva en Cali. Desde el 2017 se han situado en varios sectores, como la Avenida Roosevelt con Carrera 39, la Calle 26 con Avenida 2N, la Calle 70, la Autopista Simón Bolívar con carreras 24C y 25, en la Calle 15N con Avenida 4N, sobre la Autopista Sur en el sector de La Luna, entre otros.
Alberto Mendoza, presidente de la Federación Nacional de Taxistas, señaló que con los tachones y delineadores la estrechez en las vías es “cada vez mayor. Aquí necesitamos ampliar las calles, no angostarlas”.
Mendoza añadió que “la ineficiencia de estos elementos quedó demostrada en la Secretaría de Movilidad de Alberto Hadad con la motovía, en el Oriente. Allá no queda nada, solo los tornillos anclados al piso que, paradójicamente, son actores de accidentalidad porque los carros suelen pincharse con ellos, detrás vienen las motos a alta velocidad y, entonces, se dan los choques”.
El líder del gremio taxista hizo hincapié en que “es importante que estos cambios se socialicen antes, se utilicen materiales finos para que no se desgasten tan rápido y su instalación sea eficiente para mitigar la accidentalidad, no como se está haciendo”.
Entre tanto, el experto en Movilidad, Fernando Quintero, señaló que esta es una medida positiva para mejorar las condiciones de seguridad en las vías y reducir accidentalidad, pero cuestionó los diseños que se están implementando. “En Capri, por ejemplo, me pareció arbitrario el diseño geométrico que hicieron porque es confusa la forma en la que obligan al conductor en la que tome una curva pero que deja abierto el sentido para que el conductor decida cómo lo quiere tomar. Esto también debe apuntar a proteger al conductor”, dijo Quintero.
Seguridad vial, prioridad de taches
Ante la inconformidad de parte de algunos vecinos y conductores respecto a la ubicación de delineadores y taches sobre vías principales y secundarias de la ciudad, la Secretaría de Movilidad informó que el proceso apenas inicia y que este año se prepara la instalación de nuevos puntos.
“Estas iniciativas son de pacificación de tráfico, eso implica que debe haber una coexistencia entre diferentes actores, algunos más vulnerables como peatones, ciclistas y motociclistas, que permita que de manera democrática y regulada hagamos un uso seguro de las vías. No estamos quitándole espacio a nadie, estamos redistribuyendo la sección vial haciendo espacios más seguros”, señaló el secretario de Movilidad, William Camargo, quien indicó que estas intervenciones se están haciendo de la mano de la Agencia Nacional para la Seguridad Vial.
El funcionario explicó que los sectores que se han escogido en Cali para instalar estos elementos cumplen con parámetros como alta presencia peatonal, carácter residencial, zonas escolares y alto riesgo de accidentalidad.
En el caso del barrio El Sena se tomó la decisión de implementar los delineadores para reducir la velocidad sobre la Calle 47 entre carreras 1D y 5A y, al mismo tiempo, generar espacios seguros para los peatones y personas con movilidad reducida que requieren cruzar la calle. Allí, señaló, la velocidad promedio de los vehículos disminuyó de 60 kilómetros por hora a 40 kilómetros por hora.
“Inicialmente tenemos siete sitios con estos elementos, hay otros que están en estudio para su implementación pero tienen como finalidad única preservar la vida. Ya hemos visto una mejor operación de tráfico y, en el mediano y largo plazo, basándonos en la estadística que estamos documentando, esperamos ver una menor probabilidad y materialización de siniestros viales”, dijo Camargo.
De acuerdo con el Secretario de Movilidad, cada intervención oscila entre $25 millones y $40 millones, dependiendo de la longitud del tramo. “Estos procesos licitatorios son públicos y son verificados por entes de control y están abiertos al escrutinio público”, afirmó Camargo.
Zonas con taches
Calle 5 con Carrera 6.
IE Politécnico Municipal – Sede Célimo Rueda.
IE Politécnico Municipal – Sede Principal.
Glorieta CDI Potrero Grande.
Carrera 73 # 2A – 80.
Calle 25 con Carrera 85.
Calle 47 entre carreras 1D y 5A.
Autopista Sur con Carrera 38.
Diagonal 23 con Calle 19.
Calle 70 con carreras 24C y 25.
Calle 9 con Carrera 38.
Calle 15N con Avenida 4N.
Calle 56 con Carrera 5.
Calle 6 con Carrera 39.
Calle 13 con Diagonal 23.
Calle 36 con Carrera 46.
Calle 25 con Avenida 2N.
Calle 25 con Carrera 98.
