En Cali, ningún conductor podrá estacionar su vehículo sobre andenes, zonas verdes o zonas de espacio público destinado para peatones, recreación o conservación.

Tampoco en vías arterias, autopistas, zonas de seguridad o dentro de un cruce ni en vías principales y colectoras, donde expresamente se indique la prohibición o la restricción en relación con horarios o tipos de vehículos.

Así mismo, los conductores no pueden parquear en puentes, viaductos, túneles, pasos bajos, estructuras elevadas o en cualquiera de los accesos a estos.
Ni en zonas expresamente destinadas para estacionamiento o parada de cierto tipo de vehículos, incluyendo las paradas de vehículos de servicio público, o para limitados físicos.

Estas medidas son parte del proyecto de acuerdo que presentó el alcalde Maurice Armitage, bajo el nombre de Plan Integral de Movilidad Urbana (Pimu), las cuales se constituyen en todo un desafío y un ideal, pues en gran parte de la ciudad, la población parquea en lugares prohibidos.Todo porque hay pocos parqueaderos frente a la demanda y porque son más los infractores (un promedio de 57 diarios) que no comprenden la importancia de que muchos de estos espacios públicos son para los peatones.

El alcalde Armitage volvió a presentar el proyecto del Pimu al Concejo, luego de seis meses de estancamiento, pues el año pasado lo hizo, pero la propuesta no prosperó por las dudas de los cabildantes sobre el cobro por estacionarse en las vías. Pero debido al interés de la Administración, ya arrancó el estudio de esta iniciativa en la cual, también se estipula la regulación al sistema del transporte masivo y estímulos para la población sobre un mayor uso de las bicicletas.

En el mismo Pimu se habla de lo fundamental en avanzar en el establecimiento de la contribución por estacionamiento de uso público, en otras palabras, el cobro por parquear en la calle y aunque la apuesta ya empezó con las primeras zonas azules o Zonas de Estacionamiento Regulado (ZER) en El Peñón, el Concejo debe entrar a aprobar este año cómo se hará ese cobro, dinero que se destinará al Masivo Integrado de Occidente (MIO).

No obstante, Planeación de Cali indicó que habría dos posibilidades en ese cobro, una, a través de una alianza público-privada (APP) o que lo haga un tercero, que gane la licitación, pero que le responda con el recaudo al propio municipio.
A algunos veedores no solo les llamó la atención que empezaron las ZER en El Peñón, sin que el Pimu esté debatido en el Concejo. También que el proyecto promete incentivos laborales a funcionarios de entidades públicas que lleguen en cicla a trabajar.

La veedora Luz Betty Jiménez de Borrero considera que “el Pimu debe tener en cuenta las características en materia urbanística del centro de la ciudad, diferentes a las existentes en el sur, oriente, norte y oeste. Igualmente debe estar articulado con el Plan de Ordenamiento (POT)”.

¿Medio día libre?

“Los funcionarios públicos recibirán medio día laboral libre remunerado por cada 30 veces que certifiquen haber llegado a trabajar en bicicleta”. Empleados de empresas privadas, mixtas, industriales y comerciales del Estado y otras podrán adoptar este incentivo, con arreglo a sus propias especificaciones.

Adiós a los colectivos

En la implementación del sistema de transporte MIO, la oferta legal existente de transporte público prestada por los operadores de transporte público colectivo convencional (TPC tradicional) se irá reduciendo gradualmente hasta llegar a cero, acorde con los compromisos adquiridos por el municipio.

A definir ciclorrutas

En un plazo no mayor a dos años, Planeación municipal junto con Metrocali, buscará definir la red de proyectos de ciclorrutas priorizada. Mientras tanto, se continuará con planes de construir de redes para circular en cicla. Los concejales ponentes del Pimu son Carlos Andrés Rueda y Flower Rojas.

 

Fuente: El Tiempo