-Verificar que los impuestos esten al día.

-Validar que no tenga problemas legales como embargos.

-Mirar que la empresa que te vende el vehículo sea legal y no una empresa «Fantasma».

-Qué el vehículo no sea robado.

Sin embargo, también existen algunas acciones que corresponden a estafas de tipo mecánico en los vehículos usados: adulteraciones, maquillaje y camuflaje que evidencian daños, reparaciones mal hechas y descuidos extremos en el interior y exterior del vehículo.

Si estás vendiendo un vehículo usado:

– Publica tu anuncio, únicamente, en portales especializados y reconocidos del sector.

– No ofrezcas tu vehículo en ferias o sitios públicos que no te ofrecen garantías ni respaldo.

– Entrega tu vehículo solamente en establecimientos comerciales conocidos, destacados o recomendados por una persona de confianza.

– Por ningún motivo firmes traspasos abiertos.

– Si te ofrecen un precio de compra excesivamente superior al precio comercial, ojo, se puede tratar de una estafa.

Si estás comprando un vehículo usado:

– Busca ofertas de carros usados, únicamente, en portales especializados y reconocidos del sector.

– No compres un vehículo en ferias o sitios públicos que no te ofrecen garantías ni respaldo.

– Verifica que la negociación y el traspaso del vehículo sean adelantados directamente con el propietario.

– Revisa la tradición del vehículo y verifica que el mismo no haya sido comercializado en varias ocasiones durante un lapso de tiempo corto y no olvides realizar la revisión Técnica en Identificación de Automotores de la DIJIN.

– Si te ofrecen un precio de venta excesivamente inferior al precio comercial, ojo, se puede tratar de una estafa.

 

Fuente: Secretaria de Transito