El casco es un elemento de protección pasiva fundamental en la conducción de motocicleta, disminuyendo sustancialmente la posibilidad de mortalidad.

Fluir sobre el asfalto a bordo de una motocicleta mientras perseguimos el horizonte es sensacional. Disfrutar esa sensación usando apropiadamente los elementos de seguridad pasiva nos permite ir aún más tranquilos en el caso de afrontar situaciones inesperadas. Uno de los elementos indispensables para mantener nuestra alegría sobre la motocicleta y nuestra vida en el caso que caigamos de ella es el casco de protección, al que debemos cuidar para extender su vida útil, y garantizar que funcione de manera óptima.

Para ayudarte a cuidar tu inversión y tu seguridad, hemos identificado cinco acciones que deberías evitar, para garantizar la óptima funcionalidad y calidad de tu casco durante las actividades diarias.

Pero antes…

6 funciones básicas que cumple el casco, según la OMS

1) Reduce la desaceleración del cráneo y el movimiento de la masa cerebral en una colisión.

2) Dispersa la energía del impacto en una superficie mayor y el golpe no se concentra en un área específica, cuando esto ocurre, el resultado normalmente es mortal.

3) Evita el golpe directo del cráneo con el pavimento, pues funciona como una barrera mecánica de protección.

4) La parte frontal protege la piel de tu cara de la abrasión, en caso que seas arrastrado por un impacto.

5) Protege la cabeza de ser golpeada por objetos en la vía pública como piedras, fierros, cristales, etc. También evita que entre basura a tus ojos como insectos, polvo o basura.

6) Es recomendable comprar dos casos, uno para el conductor y otro para el momento de llevar un pasajero.

Sabiendo lo que hace tu casco por ti y tu cabeza, te proponemos conocer qué puedes hacer tú por él

5 acciones que debes evitar para proteger tu casco

Mantener el interior sin limpieza

Se recomienda realizar una limpieza al tapizado o recubrimiento interno del casco cada tres meses, teniendo en cuenta que esta es la parte del casco que tiene contacto directo y constante con la piel de tu cara. Para hacerlo es útil desmontar todo el recubrimiento para realizar un lavado en seco o húmedo, evitando hacerlo en una lavadora para evitar deformaciones o deterioro prematuro de los materiales.

No se recomienda el uso de productos abrasivos que pueden terminar afectando los materiales. En el mercado existe una variada oferta para realizar estas labores de limpieza y desinfección del casco.

Exponer el exterior a factores dañinos

El casco de moto está diseñado para aguantar el uso y el abuso, sin embargo, existen medidas sencillas que puedes evitar su deterioro, como exponerlo innecesariamente a superficies calientes como el sillín, el tanque, la parrilla o el maletero. Esto puede dañar sus partes internas y externas, y ofrecer una sensación desagradable cuando se quiera volver a usar.

En el caso del casco del acompañante, es recomendable usar un empaque cuando no se esté usando para evitar que acumule suciedad o caídas innecesarias. Proteger el visor ayuda a experimentar una mejor visión durante la conducción, por lo que se requiere una limpieza apropiada.

Evita limpiar el polvo del visor frotando un paño. Mejor retira el visor del casco y quita el exceso de polvo y suciedad, sumergiéndolo en agua con unas gotas de jabón líquido, enjuaga con más agua y deja secar o seca con paño de microfibra limpio sin frotar o restregar.

Usar altas temperaturas para limpieza y secado

No es recomendable usar limpiadoras de vapor para el interior y exterior del casco de manera regular, pues las altas temperaturas pueden poner en riesgo las condiciones estructurales del casco. Tampoco es recomendado usar secadores de cabello cuando la parte interior de nuestro casco se ha mojado por efecto de la lluvia, o cualquier otro suceso. Frente a esa situación es recomendable desmontar el interior y dejarlo secar a la sombra.

Dejarlo caer

Aunque se crea que los cascos están hechos para resistir golpes, afirmación que no es falsa; eso no significa que se deban exponer a caídas innecesarias que no estén relacionadas con la protección de su usuario.

Evitar colocarlo en zonas que puedan significar caídas es una buena alternativa para evitar esa situación. Se recomienda también el cambio del casco cada cinco años aproximadamente, o si sufre una caída considerable que pueda comprometer su funcionalidad en un momento dato. (Recuerda qué pasa en tu cabeza cuando sufres una caída y tienes el casco puesto).

No usar pañoleta o balaclava

Este tipo de accesorios ofrecen una mayor comodidad para el usuario durante el uso del casco, pero también generan una barrera entre la piel del piloto y el material espumado interno, minimizando la trasferencia de sudor hacia el casco. Este tipo de elementos garantiza que las condiciones internas del casco se mantengan óptimas, y evita la limpieza excesiva del mismo, aumentando su vida útil.

 

FUENTE: PUBLIMOTOS