Entre los años 2016 y 2017 ingresaron al país más de 80.000 llantas, a través de una figura conocida como ‘contrabando técnico’, que les permite a los importadores evadir el pago de impuestos y aranceles. Este no es el único problema, al cual la Dirección de Impuestos Nacionales, Dian, ya le sigue la pista.

Lo más delicado es que muchas de esas llantas se están vendiendo en el mercado sin cumplir lo exigido por el reglamento técnico (RT), lo cual pone en peligro la seguridad de los automovilistas y sus pasajeros.

Fuentes consultadas por EL TIEMPO indicaron, bajo reserva de su nombre, que algunos importadores utilizan una subpartida arancelaria incorrecta para nacionalizar la mercancía con el fin de evadir el pago del arancel o del IVA, el Reglamento Técnico de Llantas y la Gestión de Llantas Usadas.

Para que una llanta se pueda comercializar en Colombia debe cumplir con los requisitos del reglamento técnico; y el distribuidor o lugar donde se compre debe entregar de forma obligatoria al cliente un folleto.

“En este folleto que debe estar en español, se indican las instrucciones de uso, condiciones de instalación, advertencias, usos previstos, la identificación del productor y/o importador, y debe ir acompañado del certificado de conformidad que exige el RT”, aclara la Superintendencia de Industria y Comercio.

Si bien la mayoría de importadores y distribuidores de llantas de llantas cumplen con las normas, hay en el comercio sitios donde las ofrecen por debajo del precio regular e incluso sin IVA, y por ende sin factura, lo cual habla muy mal de la ética comercial del lugar.

Preocupa también el ingreso ilegal de carcasas usadas y llantas reencauchadas por La Guajira y Nariño. Desde allí son distribuidas al resto del país violando el Convenio de Complementación en el Sector Automotor, el cual sólo autoriza importaciones de componentes, partes y piezas nuevas sin reconstruir o reacondicionar.

Otro factor es el contrabando tradicional a través de las extensas fronteras que no son fáciles de vigilar. Aún así entre 2017 y 2018 la Dian hizo 48 aprehensiones de mercancías por valor de 465 millones de pesos.

En 2017 las ciudades con mayor número de casos, según datos suministrados por la Policía Fiscal y Aduanera –Polfa–, fueron Cúcuta, Valledupar, Riohacha, Santa Marta, Buenaventura, Cartagena e Ipiales, en donde se incautaron 858 llantas provenientes de China, Venezuela, Brasil y Corea principalmente. En este año 757 unidades han sido confiscadas en Bogotá, Barranquilla y Valledupar.

Llanta buena vs mala


Las llantas son un importante elemento de seguridad y las encargadas de brindar direccionalidad, confort, estabilidad, soportar el peso del vehículo y proporcionar un buen frenado en cualquier tipo de terreno.

Sin embargo, poca atención se presta al cumplimiento de estos atributos al comprar llantas, atributos que en buena parte son sacrificados por el precio, que en una economía como la nuestra es fundamental para no ‘golpear el bolsillo’. Claro que no siempre lo barato significa mala calidad, pero sí es importante identificar y diferenciar una llanta buena de una mala.

En el mercado hay una gran variedad de llantas procedentes de diversos países, unas de marcas muy reconocidas, otras no tanto. La principal recomendación es comprar llantas en sitios reconocidos bien sean distribuidores oficiales o multimarca, o en almacenes de grandes superficies y que sus medidas se ajusten a lo que recomienda el fabricante del vehículo en su manual.

Es importante que el comprador exija la factura con IVA, el folleto y la certificación que exige la ley, y denuncie ante la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) cuando no lo hacen. Es probable que esa llanta que le están vendiendo sea de contrabando y sea de mala calidad, lo cual la convierte en un elemento potencialmente inseguro.

“Si un ciudadano tiene conocimiento de esta situación y quiere denunciar, puede hacerlo a través de cualquiera de los canales habilitados por la SIC como el correo electrónico institucional contactenos@sic.gov.co, y lo podrá hacer de manera anónima”, comenta el Superintendente delegado de la SIC.

Reglamento técnico


El reglamento técnico de llantas nuevas y reencauchadas, determina las cualidades técnicas y de calidad que deben tener, y fue elaborado por el Ministerio de Comercio mediante las resoluciones 481 de 2009 y la 230 de 2010 con la Norma Técnica NTC-5384.

Tras un análisis técnico el gobierno a través del mismo Ministerio, determinó que debía actualizarse y desde 2015 viene trabajando en ello en coordinación con las empresas fabricantes de llantas, importadores, reencauchadoras y el Incontec. Según Hernando Díez, presidente de la Asociación Nacional de Reencauchadores, “se han realizado los aportes necesarios para que la actualización del RT, sea aplicado de manera correcta y no sujeto a diversas interpretaciones, además se determinó entregar la competencia de su aplicación al Ministerio de Transporte, específicamente a la Agencia de Nacional de Seguridad Vial – ANSV”.

 

Fuente: Motor