Para nadie es un secreto que el tema de la movilidad en las capitales colombianas se está volviendo un problema, no solo para quienes tienen que usar los sistemas de transporte masivo, pues los que se mueven en particulares lo padecen de igual forma día a día. Además el tema de la contaminación ambiental y el incremento desmesurado de vehículos de combustión nos está ahogando. Esto ha motivado a empresas como Auteco ha impulsar la movilidad eléctrica, no solo enfocados en las motos, pues parte de su portafolio lo componen diferentes modelos de bicicletas que cada día se ven más en las calles de nuestras “metrópolis”.

Desde el año 2016, Auteco lanzó su línea especializada en movilidad alternativa bajo el nombre de Auteco Electric y con ellos llegaron las Stärker. Hoy son 14 puntos de venta en el Valle de Aburrá, una zona donde la contaminación está generando la migración de las 4 las 2 ruedas, con una cifra nada despreciable del 60% de bicicletas frente al 40% de motos eléctricas, los paisas parecen estar cambiando el chip. Parte de este cambio tiene que ver con la facilidad de moverse por la ciudad en sus bicicletas, la practicidad para recargarlas y su precio.

En materia de demanda por nuestros productos, podemos decir que hemos vendido más de 4.000 unidades en todo el país y tenemos pronosticado aumentar nuestro portafolio con nuevos lanzamientos y alianzas para todo tipo de necesidades, agrega Alejandro Mesa, gerente de mercadeo y ventas de movilidad eléctrica de Auteco.

Si pensamos un poco en los temas primordiales a la hora hacer la compra de uno de estos vehículos, lo primero que nos llega a la mente es la autonomía, pues no todos tenemos un Rigoberto Urán o un Nairo en nuestro interior, es por ello que el tema de 60 kilómetros por carga son más que suficientes y si a esto se le suma la facilidad para extraer la batería para conectarla a un toma de 110 voltios, la facilidad es mucha con respecto a algunas de las motos de igual tecnología.

Ante las creciente demanda por este tipo de vehículos, la marca antioqueña ya está distribuyendo la segunda generación, que incluye baterías con mayor autonomía, motores con capacidad para recargarlas gracias al sistema de regeneración de frenado.

Así pues el cambio de condiciones en el tráfico urbano, la contaminación y la practicidad que ofrecen estos vehículos de dos ruedas, e incluso el estímulo por parte de algunas empresas par que sus empleados se inclinen por este tipo de vehículos, están llevando a muchos de los usuarios de los autos tradicionales a migrar a la movilidad sostenible y muchos se inclinan por las bicicletas.

 

Fuente: la revista de motos