El cinturón de seguridad juega un papel muy importante a la hora de conducir, pues tiene la capacidad de proteger y salvar la vida de los pasajeros en caso de un accidente.

Antiguamente, para los fabricantes de vehículos era opcional ofrecer cinturones de seguridad, pero dado que los accidentes viales provocaban muchos heridos y muertes, se implementaron normas para asegurar que todos los vehículos incorporasen de forma obligatoria los cinturones de seguridad. Es más, después de estudios hechos por expertos en seguridad vial.

¿Cómo algo tan básico puede ser tan importante?

La tecnología del cinturón de seguridad permite retener al pasajero en el asiento en caso de que haya un “frenazo” o una colisión. Seguramente lo habrás notado: en el momento en que un vehículo frena, el cinturón de seguridad se tensa; esto es gracias a su mecanismo, que detecta cuando la inercia del vehículo se retrae. Ante un accidente o si debemos frenar en forma brusca, esta misma inercia puede causar que un pasajero atraviese el parabrisas del vehículo y que termine severamente herido o, en el peor caso, muerto.

¿Sabes cuándo debes usarlo?

¡Siempre! Incluso cuando no estés conduciendo a velocidades altas. Hoy en día, el uso del cinturón de seguridad es parte de las normas que tenemos que cumplir al conducir. Aparte de que el uso del cinturón de seguridad es obligatorio por ley, también hay que asegurarse de que todos los pasajeros del vehículo estén usando el cinturón de seguridad, excepto para bebés y niños pequeños que tengan asientos especiales (los cuales traen su propio cinturón de seguridad).

 

FUENTE: SECRETARIA DE TRANSITO