La motocicleta es un vehículo complejo y completo como cualquier otro, por tal motivo se debe hacer un mantenimiento previo cada vez que se pone en marcha, más aún, cada cierto kilómetros recorrido.
Los frenos son unos puntos de los que más se debe prestar atención, es muy frecuente que arranques sin revisar ningún componente y este tipo de acciones están mal, arriesgando tu seguridad y la de los demás entes viales.
Ahora bien, existen dos tipos de frenos, El freno disco y de pastas o de tambor. ¿Pero cuál es el mejor?, En efecto el mejor es el freno disco gracias al agarre y adherencia.
Generalmente las motos cuentan con dos frenos de tambor, o uno de tambor y otro de disco adelante, o también los dos de disco. Ambos son importantes y se debe realizar un mantenimiento visual que podemos hacer con facilidad.
Freno de disco
El freno disco tiene unos componentes externos esenciales los cuales son; el disco de freno, liquido de frenos, manguera o conducto del líquido, pastas y mordaza.
por consiguiente, hay que prestarle el cuidado necesario a cada uno de los componentes.
También prestarle atención a la calidad del disco, el nivel del líquido de freno, la calidad que tiene este y el desgaste de las pastas.
Es cierto, cada de estos componentes tiene una vida útil, incluso el propio disco. al presionar las levas el líquido comienza hacer presión y por efecto hace ajustar las pastas al disco.
Como cuidar el freno de disco
El freno de disco funciona por fricción entre el disco y las pastillas, ambos con el tiempo se desgastan, el primero se desgasta menos, pero igual lo hace.
1. Si lavas la moto, también debes lavar los frenos
Si tienes la moto nueva o las pastillas nuevas entonces deberías hacer la práctica de “rodar». Consiste en realizar frenados suaves y ligeros para luego soltar el freno, y repites lo mismo. Esto, para que las pastillas se adapten a la superficie del disco y más adelante no tengas problemas.
2. Cuidado con los ruidos y vibraciones
No descuides los ruidos, si sientes ruidos o vibraciones en los frenos puede ser por un desgaste de pastillas o el disco. Si es así, cambia el componente averiado.
Muchos se acostumbran a solamente lavar la superficie externa de la motocicleta, pero existen componentes útiles que necesitan una limpieza.
Limpia el disco, pastillas y pinzas con algún jabón desengrasaste, posteriormente quita el jabón con agua limpia. Asegúrate de que no queden residuos de grasa en el disco y evita tocarlo con objetos rígidos.
Para secar puedes usar aire a presión y posteriormente pasar papel para secar, o solamente usar papel. Si tienes dinero puedes utilizar un contant cleaner, es un producto especializado en superficies de contacto.
Con práctica de la limpieza levantas la suciedad, la grasa y el polvo incrustado en el disco, asegurando una mejor adherencia y alargando la vida útil del mismo.
3. Debes mantener el nivel del liquido de frenos
Los pistones de freno se separan para adaptarse al desgaste del material de la pastilla, perdiendo grosor. Así se disminuye el líquido de frenos.
Asegúrate de que el líquido no este por debajo del indicador en el depósito, si es así debes echar líquido de frenos nuevamente.
En el depósito del líquido de frenos está marcado el tipo de este; DOT-4 o DOT-5. Debes usar esta referencia para conseguir el tipo de líquido que necesitan tus frenos.
Freno de tambor
Los frenos de tambor últimamente ya no se están usando, generalmente se encuentran en motos pequeñas y solamente en la llanta de atrás.
Está compuesto por campana, bandas, porta bandas, resortes, varilla de freno y pedal. Este sistema presenta riesgos debido a la necesidad de más cuidados y no es tan efectivo como el freno de disco.
Cuando está muy usado en el freno de tambor se comienza a presentar estos inconvenientes: el pedal está muy bajo y hay que hacerle mucha presión con el pie, la varilla del freno está al máximo del tornillo que la sujeta. En estos casos, es indispensable que no se presente ningún sonido.
Cuando se desgasten las zapatas se debe tensar la varilla o cable del freno de tambor. Si quieres ir más allá, puedes desmontar la rueda y limpiar las pistas de contacto de las zapatas.
Con una lija quitas el material acumulado en la zapata, revisa bien que todo este en orden y si las zapatas están desgastadas debes remplazarlas.
Ajusta la presión del freno que no quede ni tan duro ni tan suave para presionar la palanca de frenos.