En los cuatro primeros meses de este año, las infracciones por pasarse semáforos en rojo y amarillo, así como irrespetar la señal de ‘Pare’ y los semáforos intermitentes en rojo, aumentaron un 877 % en Cali, con respecto al mismo periodo del año anterior.

En cifras, desde el primero de enero hasta el 30 de abril del presente año, fueron impuestos 31.609 multas por este motivo, 28.373 más que los primeros cuatro meses del 2018, cuando se realizaron 3236 comparendos.

De esta estadística, el 97,8 % de las infracciones fueron a impuestas a través de equipos de fotodetección, siendo marzo y abril los meses en que se generaron más multas.

Vale la pena precisar que desde el primero de marzo de este año, las 40 cámaras fijas de fotomultas que hay Cali empezaron a sancionar a los conductores por pasarse semáforos en luz amarilla, lo que desató un debate en la ciudad.

Por una parte, las autoridades y expertos de tránsito consideran que este es un mecanismo efectivo para reducir la accidentalidad vial. Por otro lado, están quienes aseguran que esta es “otra manera más del Gobierno para sacarle dinero a los ciudadanos”.

Los comparendos impuestos, mediante las cámaras de fotomultas, se pueden expedir tras un decreto vigente desde el 26 de julio del año 2010, cuando el Ministerio de Transporte expidió la resolución 3027.

Por tal motivo, William Camargo, secretario de Movilidad de Cali, aseguró que este es un mecanismo legítimo, basado en la norma que establece que “la activación de semáforos en amarillo implica la detención de los vehículos con el propósito de ceder la prelación a otro flujo de tráfico o a los peatones”.

“Que algunos usuarios por desconocimiento o por flexibilidad en la vía asuman que pueden pasarse estos dispositivos en luz amarilla, es otro tema; pero nosotros estamos cumpliendo con lo que dice el Código Nacional de Tránsito Terrestre, respecto al deber que tienen los conductores de respetar los elementos de regulación y ordenación del tránsito, como son los semáforos”, aseveró Camargo.

Cuando se le preguntó al secretario de Movilidad las razones por las que solo hasta hace dos meses la Alcaldía de Cali empezó ha implementar la medida de sancionar el cruce de semáforos en amarillo a través de las fotomultas, este respondió que “el cambio de procedimiento de imposición sobre una infracción nueva implica un protocolo, revisión tecnológica y realizar unas pruebas de instrumentalización, que deben hacer los diferentes actores que concurren en la aplicación de un comparendo”.

“Además, sancionar esta conducta nos ha permitido reducir los índices de siniestralidad en la ciudad. Justamente, con este y otros mecanismos hemos logrado una disminución de 17 víctimas fatales durante lo que va corrido del presente año, en comparación al mismo periodo del 2018, cuando hubo 114 muertos en las vías. Lo anterior tiene que ver con tres elementos: ingeniería, educación y control”, indicó Camargo.

De hecho, un estudio realizado por el Instituto Cisalva de la Universidad del Valle, determinó que en los puntos donde se instalaron sistemas de fotodetección en Cali, los accidentes de tránsito se redujeron en un 17 %, pues pasaron de 46.087 registros, antes de la instalación, a 19.469 casos después de la puesta en marcha de estos aparatos.

En dicha investigación se compararon los datos de eventos viales desde el 2008 al 2014, en 33 de los 40 puntos fijos donde se instalaron fotomultas, con otros 39 lugares de control donde no se pusieron estos dispositivos.

“Los resultados son claros y contundentes: donde se coloca una cámara de fotodetección existe una reducción de la siniestralidad, no solo en el punto en la que esta se instala, sino alrededor de las intersecciones. Es un tema que está probado en Cali y a nivel internacional. Si hablamos del caso de los semáforos puntualmente, hay que decir que, por seguridad vial, la luz amarilla es para detenerse y no para acelerar el vehículo”, explicó James Gómez, experto en seguridad vial.

Para Milton Victoria, director de la Red de Taxistas de Cali, multar por irrespetar un semáforo en amarillo constituye una estrategia del gobierno para sacarle más dinero a los ciudadanos y no es una forma eficaz de disminuir los accidentes de tránsito.

“A uno siempre lo han capacitado para comprender que la luz roja de un semáforo es parar, la verde para seguir y la amarilla para estar atento. Sin embargo, como en los sitios donde hay fotomultas prácticamente la gente no volvió a pasarse los semáforos en rojo, ahora la Secretaria de Movilidad necesita justificar la instalación de estos equipos y por eso recurrieron a multar amarillo”, aseveró Victoria.

 

Fuente: el país