La marca ha presentado una exposición que recorre casi medio siglo de evolución en el equipamiento para el motorista.
Museos de coches hay muchos en el mundo. También de motos. Incluso de competición. Lo que ya resulta menos frecuente es una exposición permanente dedicada al equipamiento de seguridad de los motoristas. Se necesita tradición, experiencia y prestigio para reunir en un único espacio el material necesario para que la muestra resulte atractiva e interesante. Algo que sólo puede hacer una marca como Dainese, que acaba de presentar su museo en la propia sede de la empresa, en Vicenza (Italia) y que abrirá sus puertas al público el próximo 27 de julio.
Lo han querido denominar Dainese Archivio (DAR), porque su objetivo pasa por convertir este espacio de 900 metros cuadrados en algo más que un simple museo, como explica Lino Dainese, su promotor y director: “Es el trabajo y los esfuerzos de toda una vida que cobran forma. DAR no es un museo, es el archivo evolutivo de una empresa que mira al futuro”. La exposición se encuentra divida en 20 secciones temáticas, en las que se tratan las diferentes áreas de actuación de la compañía y que trasciende la más popular del motociclismo: deportes de invierno, ciclismo, equitación, vela, prendas aeroespaciales…
Son más de 500 las prendas que sirven como hilo conductor de la evolución estilística y tecnológica de una marca que comenzó su actividad en 1972 en un garaje de Molvena, donde tres amigos crearon sus primeros pantalones destinados a la práctica del motocross. Su crecimiento fue imparable y en 2007 el grupo adquirió la prestigiosa marca de cascos AGV, incrementando así de forma significativa su presencia tanto en la competición (Valentino Rossi es su principal embajador) como en las carreteras con el uso de sus productos por miles de motoristas en todo el mundo.
El DAR dispone de sistemas interactivos para que los visitantes puedan conocer la historia de la marca y su evolución a lo largo del tiempo, sus logros en competición y el estado de sus investigaciones de seguridad. Pero quizá lo más valioso y llamativo sea la impresionante colección de prendas genuinas de grandes pilotos de la historia del deporte. Cascos, monos de cuero, chaquetas e incluso algunas motos legendarias que convierten la muestra en una experiencia única para los aficionados.
