Trucos, consejos y tips hay muchos para viajar en moto, pero estos dos son muy importantes para que no pierda el impulso a la mitad del camino, y pase de ser el viaje soñado a la peor de las travesías.

¿Sabe si todas las partes vitales de la moto resistirán el viaje?

Hay factores determinantes a la hora de viajar en moto, uno de ellos sin duda será el estado mecánico de nuestra máquina.

Es diferente una moto nueva o en la que hemos sido nosotros mismos los dueños por mucho tiempo, donde sabemos los ajustes y reparaciones que ha recibido, en comparación a una moto de segunda, que nos puede presentar muchas sorpresas, por eso es muy importante saber quién ha tenido la moto y el historial mecánico, para poder anticiparse a problemas simples o complejos, en los que no cualquiera le puede meter la mano.

Una cosa es el comportamiento y exigencia que tienen nuestras motocicletas en ciudad y los recorridos matutinos, donde es probable que nunca moleste, y otro el que puede llegar a tener en la carretera, recorriendo largas distancias y estando expuesta a altas temperaturas, carga de equipaje, topografía del terreno o inclemencias del clima.

Los motores de baja cilindrada, claramente no están hechos para altas exigencias, no obstante ¿Quién no ha viajado en ellas y ha conocido decenas de lugares gracias a estas pequeñas compañeras de aventuras? Por ende debemos estar más pendientes de los mantenimientos preventivos y correctivos, aunque un motor pequeño se expone a mayores desgastes, sobre todo al ser exigido en la parte alta del cuenta kilómetros por largo periodos, o en interminables ascensos, donde queremos tener mayor velocidad, llegando a fatigar ciertas motopartes.

También es importante llevar la cuenta de la duración de piezas que son necesarias cambiar por fricción: frenos, kit de arrastre, llantas. Hay otras que son internas y que si no detectamos a tiempo en un mantenimiento pueden jugarnos una mala pasada: caja de velocidades, embrague y otros elementos más difíciles de detectar, como piezas del motor; siendo estas las que nos pueden significar una ¡varada, varada! y aquí es donde empieza el karma, empujar la moto, buscar ayuda, la consecución de las piezas, etc; además teniendo en cuenta que muchas motos adolecen de estar aseguradas por pólizas, lo que ocasionará que el precio de transporte aumente al tener que acudir a una grúa, ¡ojo! muchas piezas simples se consiguen, pero las internas pueden ocasionar mayor tiempo de espera, de reparación, mala mano de obra, hospedaje y alimentación extra. En resumen, se amargó, se quedó sin plata y se dañó el paseo. Retornando sin recursos, decepcionado y con un deseo frustrado. Una llanta, un neumático, una guaya se reparan, pero un problema de caja o interno del motor se complica en poblaciones secundarias.

Así que un mantenimiento general es una buena opción para detectar posibles fallos y de paso, dejar la moto completamente lista en todo aspecto para viajar. Una correcta sincronización y calibración de válvulas influirán en el rendimiento y consumo de la motocicleta.

Los modelos de alto cilindraje, en general, cuentan con piezas de mayor resistencia, calidad, tecnología y resistencia al desgaste, por lo tanto pueden hasta cuadriplicar el kilometraje antes de una reparación con respecto a un motor pequeño, pero no quiere decir que hayan elementos que de acuerdo al uso, materiales y deterioro hagan que se requiera un cambio prematuro, y por la poca rotación o la exclusividad de la marca dificultarán la posible solución en el camino.

Pilotos veteranos y muy experimentados han tenido estos sucesos, ahora imagínese lo que puede pasar un novato.

No llevar herramienta puede convertir un simple pinchazo o un bombillo fundido en toda una pesadilla, revise la tornillería y cargue las llaves que necesita su motocicleta (en el mercado hay muchos kits portátiles y completos). Un bombillo adicional de recambio, amarres plásticos, neumáticos, tacos, linterna etc. Puede ser necesarios en cualquier comento.

Las circunstancias de la carretera, ascensos prolongados y exigencia del piloto en rectas interminables, hacen que la motocicleta y sus componentes se lleven al límite. Donde la refrigeración, lubricación y puesta a punto de la motocicleta son determinantes para un buen viaje. Así que la acumulación de kilometraje en algunas piezas son significativos para el propulsor de nuestra máquina, y se debe estar pendiente con lo que recomienda el fabricante en el manual de uso.

¡Ojo con la gasolina a la hora de tanquear!

Es claro que nuestro país no goza de una óptima calidad en los combustibles, y si a esto le sumamos que muchas estaciones de abastecimiento no cuentan con las mejores condiciones de almacenamiento, de dudosa procedencia o actos inescrupulosos que alteran sus componentes con tal de sacar mayor provecho… en fin.

El punto es que muchos viajeros han sufrido en carne propia las consecuencias de una mala tanqueada de combustible de dudosa calidad. En donde la tecnología de alimentación del motor juega un papel importante y no siempre la última generación electrónica se ve bien beneficiada.

Los motores que se alimentan de carburadores se llevan la menor consecuencia, ya que son fáciles de manipular y sus elementos mecánicos permiten una limpieza ágil y cualquiera con conocimientos de mecánica básica lo podría solucionar. Pero el problema va más allá, ya que estos inconvenientes suceden tiempo después de abastecernos, y podemos empezar a encontrar ahogos e incluso dejar nuestras motocicletas sin que puedan volver a encender, y si a esto le sumamos una ruta solitaria y poco transitada, la angustia será peor.

Con esta recomendación no buscamos dar soluciones de mecánicas, pero saber dónde se drena nuestro carburador será crucial para desvararnos, pero un mal combustible o con agua, hará que esta situación se repita.

En las motos de mayor tecnología y sistemas de inyección electrónica de combustible, la cosa se complica, a lo que también debemos sumar que muchas de ellas cuentan con una compresión alta y requieren de gasolina extra o de mayor octanaje, difícil de encontrar en ciertos municipios o pueblos, así que lo mejor es calcular bien la autonomía y abastecerse completamente en estaciones de servicio reconocidas, y por qué no, llevar un galón adicional como parte de nuestro equipamiento.

Si se va a quedar sin gasolina, bájele al acelerador, mantenga velocidades altas a pocas revoluciones y lleve un ritmo constante, se sorprenderá como bajará el consumo y la oportunidad de llegar nuevamente a abastecerse.

Si no consigue combustible extra, no quiere decir que tanquear con gasolina corriente dañe el motor, podrá usarla mientras ubica una estación que si cuente con la requerida para volver a llenar completamente.

Además tenga en cuenta que no hay servicio técnico especializado en muchos lugares y la falta de experticia o herramientas de diagnóstico para revisar motos con electrónica avanzada harán que una grúa sea quien nos remolque hasta llegar a una ciudad principal, que cuente con los equipos que se requieren para un buen análisis.

Nuestro director de Publimotos, Alejandro Rubio, fue víctima de este inconveniente, a bordo de su KTM 1290 Super Duke GT, en Planeta Rica Córdoba, al salir de esta población hacia la Costa, hace un año; donde después de quedarse varado en la carretera y acudir a la ayuda de varios técnicos que opinaban obviamente que eran otros componentes, por fin, encontró uno con los conocimientos que la máquina requería y encontraron que todo el combustible que se había equipado era el causante de la varada, luego. La solución fue botar los casi 6 galones, perder cerca de 5 horas en busca de la solución y herramienta. Esta motocicleta tenía menos de 5 mil kilómetros, así que toco buscar combustible de buena calidad para hacerla encender y luego tanquear en otro lugar con buenas instalaciones y reconocido.

De esta manera, el combustible pude llegar a perjudicar a cualquier moto, sin importar su modelo, marca y kilometraje.

Estos casos le pasan a los súper experimentados, veteranos e indudablemente mucho más a los novatos. Con esto buscamos dar información valiosa y un “recorderis”.

 

FUENTE: PUBLIMOTOS